Ventajas y desventajas de orientar un proceso de formación virtual de aprendizaje
En 1977 el japonés Koji Kobasyashi anuncio en Estados Unidos que el futuro desarrollo de su compañía (Nec Corporation) se haría por medio de la combinación de Tecnologías de la Información y Comunicación (TICs), facilitada por los nuevos dispositivos semiconductores a larga y alta escala de integración. En su teoría de TICs indica el permanente aceleramiento de los métodos de difusión de señales, los métodos analógicos y los digitales. Inicialmente ondas senoidales, luego por transmisión digital, finalmente los datos, el video y la voz. Mientras se desarrollaba el famoso computador ENIAC.
En 1980, afirmo Kobasyashi “Mi sueño es crear una vida social y cultural más plena para toda la gente en todas partes y hacerlo con sistemas de información que cualquiera pueda usar”.
En 1986, establece un nuevo concepto de los sistemas de comunicación y educación “apoyar las actividades de producción del pensamiento – actividades intelectuales en forma integrada… a fin de comunicar sus sentimientos, el hombre utiliza la boca para hablar, el dedo para calcular, los ojos para leer y todas las actividades están integradas en su conciencia”.
Por consiguiente, en caso de mayor información entre un hombre y su sistema, las actividades intelectuales del hombre deben apoyarse no en forma individual, sino en forma integrada.
En efecto, la educación virtual es una experiencia reciente, que ha tenido una expansión vertiginosa en el mundo entero. Como ha sucedido en otros campos, la aplicación de las herramientas tecnológicas digitales a la educación se han desarrollado con la finalidad de permitir al estudiante acceder al conocimiento, indicándole fuentes de información y adiestramiento en el manejo de las mismas. Abrir las posibilidades de educar sin fronteras, es entender que la sociedad ha logrado un gran avance en su arduo camino en la alfabetización mundial.
El paradigma de la “virtualidad” o “educación asistida con tecnología”, permite generar nuevas y mejores formas de enseñar y aprender, a la velocidad que el mundo globalizado y voraz de información necesita, para cumplir las necesidades que hoy por hoy, exige la nueva sociedad del conocimiento, una sociedad crítica, analítica, intuitiva e innovadora, pero sin dejar de lado su base conceptual y razón de ser.
Actualmente, el profesor esta pasando de jugar el papel de proveedor del conocimiento a un rol de tutor, facilitador, asesor, motivador y consultor del aprendizaje.
Los estudiantes adoptan el aprendizaje autónomo para avanzar a su propio ritmo y crecer intelectualmente, son muchas las ventajas como el hecho de poder capacitarse en cualquier lugar de forma asincrónica.
Como en la modalidad virtual no se cumple un horario establecido por el tutor, ni tampoco se mantiene un contacto físico (face to face), existe el mito de la “pasividad” del estudiante frente a este medio, por lo que se percibe como un “medio facilista” y algunas veces deserción en el proceso de estudio.
Esto conlleva al tutor, de optar por un mecanismo de incentivación o estructura pedagógica en su asignatura para captar la atención de sus estudiantes. Si el tutor en el proceso de formación no logra superar esta dificultad organizativa el fracaso en su modalidad virtual es terminante. Ahora, hay que analizar que tan apático o reacio puede llegar a ser el estudiante a la informática o al entorno de la plataforma virtual, existen maneras de ayudar con herramientas lúdicas (videotutoriales) que lo lleven de la mano y le muestre una salida fácil y practica para reanudar su proceso de formación.
De igual forma, el tutor tampoco debe ser un experto en tecnología para poder asesorar pero si debe obtener unos conocimientos básicos del entorno (plataforma) donde este impartiendo su clase.
Ahora, en el mercado laboral los encargados de contratar a los futuros profesionales ¿Es posible que valoren de igual manera a los egresados de las aulas de una institución prestigiosa, que a los graduados de una universidad virtual?. Es un reto que tiene que asumir el e – learning en el siglo XXI, la consistencia de los contenidos programaticos marcará la pauta en las asignaturas impartidas por el profesor y posterior preparación de sus egresados.
El reto que debe asumir el Ministerio de las TICs en Colombia http://www.mintic.gov.co/, es brindar un acceso a la educación virtual y reducir los indices de analfabetismo digital de las poblaciones apartadas como la depresión momposina que cubre los departamentos de Bolívar, Magdalena, Sucre, Cordoba y Cesar. Ademas de los departamentos del Cauca, Amazonas, Chocó, Nariño, Vaupés, Guainía, Putumayo, Caqueta, La Guajira, Vichada, Arauca, Guaviare y Casanare.
El gobierno resuelve este problema invirtiendo en los departamentos mencionados aulas virtuales con las siguientes herramientas:
- Ordenadores suficientes para integrar 200 estudiantes (como mínimo).
- Plataformas virtuales de educación utilizando un gestor de contenidos gratis como Moodle que integre registre notas, deserción escolar y los siguientes componentes:
- Videoconferencias
- Audioconferencias
- Chat
- Contenidos Digitales - OVA (Objetos Virtuales de Aprendizaje).
- Gestión documental
- Bibliotecas virtuales
- Hemerotecas virtuales
Todo esto para impartir una educación de calidad con alianzas educativas para reducir la brecha digital.
La enseñanza virtual logrará un impacto significativo, cuando los docentes de educación tradicional y el gobierno comiencen a ver con otra vision las TICs como herramientas de apoyo al quehacer pedagógico.
En 1980, afirmo Kobasyashi “Mi sueño es crear una vida social y cultural más plena para toda la gente en todas partes y hacerlo con sistemas de información que cualquiera pueda usar”.
En 1986, establece un nuevo concepto de los sistemas de comunicación y educación “apoyar las actividades de producción del pensamiento – actividades intelectuales en forma integrada… a fin de comunicar sus sentimientos, el hombre utiliza la boca para hablar, el dedo para calcular, los ojos para leer y todas las actividades están integradas en su conciencia”.
Por consiguiente, en caso de mayor información entre un hombre y su sistema, las actividades intelectuales del hombre deben apoyarse no en forma individual, sino en forma integrada.
En efecto, la educación virtual es una experiencia reciente, que ha tenido una expansión vertiginosa en el mundo entero. Como ha sucedido en otros campos, la aplicación de las herramientas tecnológicas digitales a la educación se han desarrollado con la finalidad de permitir al estudiante acceder al conocimiento, indicándole fuentes de información y adiestramiento en el manejo de las mismas. Abrir las posibilidades de educar sin fronteras, es entender que la sociedad ha logrado un gran avance en su arduo camino en la alfabetización mundial.
El paradigma de la “virtualidad” o “educación asistida con tecnología”, permite generar nuevas y mejores formas de enseñar y aprender, a la velocidad que el mundo globalizado y voraz de información necesita, para cumplir las necesidades que hoy por hoy, exige la nueva sociedad del conocimiento, una sociedad crítica, analítica, intuitiva e innovadora, pero sin dejar de lado su base conceptual y razón de ser.
Actualmente, el profesor esta pasando de jugar el papel de proveedor del conocimiento a un rol de tutor, facilitador, asesor, motivador y consultor del aprendizaje.
Los estudiantes adoptan el aprendizaje autónomo para avanzar a su propio ritmo y crecer intelectualmente, son muchas las ventajas como el hecho de poder capacitarse en cualquier lugar de forma asincrónica.
Como en la modalidad virtual no se cumple un horario establecido por el tutor, ni tampoco se mantiene un contacto físico (face to face), existe el mito de la “pasividad” del estudiante frente a este medio, por lo que se percibe como un “medio facilista” y algunas veces deserción en el proceso de estudio.
Esto conlleva al tutor, de optar por un mecanismo de incentivación o estructura pedagógica en su asignatura para captar la atención de sus estudiantes. Si el tutor en el proceso de formación no logra superar esta dificultad organizativa el fracaso en su modalidad virtual es terminante. Ahora, hay que analizar que tan apático o reacio puede llegar a ser el estudiante a la informática o al entorno de la plataforma virtual, existen maneras de ayudar con herramientas lúdicas (videotutoriales) que lo lleven de la mano y le muestre una salida fácil y practica para reanudar su proceso de formación.
De igual forma, el tutor tampoco debe ser un experto en tecnología para poder asesorar pero si debe obtener unos conocimientos básicos del entorno (plataforma) donde este impartiendo su clase.
Ahora, en el mercado laboral los encargados de contratar a los futuros profesionales ¿Es posible que valoren de igual manera a los egresados de las aulas de una institución prestigiosa, que a los graduados de una universidad virtual?. Es un reto que tiene que asumir el e – learning en el siglo XXI, la consistencia de los contenidos programaticos marcará la pauta en las asignaturas impartidas por el profesor y posterior preparación de sus egresados.
El reto que debe asumir el Ministerio de las TICs en Colombia http://www.mintic.gov.co/, es brindar un acceso a la educación virtual y reducir los indices de analfabetismo digital de las poblaciones apartadas como la depresión momposina que cubre los departamentos de Bolívar, Magdalena, Sucre, Cordoba y Cesar. Ademas de los departamentos del Cauca, Amazonas, Chocó, Nariño, Vaupés, Guainía, Putumayo, Caqueta, La Guajira, Vichada, Arauca, Guaviare y Casanare.
El gobierno resuelve este problema invirtiendo en los departamentos mencionados aulas virtuales con las siguientes herramientas:
- Ordenadores suficientes para integrar 200 estudiantes (como mínimo).
- Plataformas virtuales de educación utilizando un gestor de contenidos gratis como Moodle que integre registre notas, deserción escolar y los siguientes componentes:
- Videoconferencias
- Audioconferencias
- Chat
- Contenidos Digitales - OVA (Objetos Virtuales de Aprendizaje).
- Gestión documental
- Bibliotecas virtuales
- Hemerotecas virtuales
Todo esto para impartir una educación de calidad con alianzas educativas para reducir la brecha digital.
La enseñanza virtual logrará un impacto significativo, cuando los docentes de educación tradicional y el gobierno comiencen a ver con otra vision las TICs como herramientas de apoyo al quehacer pedagógico.
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